Por supuesto que en toda empresa conoces gente, ganas dinero, incluso puedes ser feliz trabajando. Pero esto ocurre si manejas adecuadamente el poder que tienes. Sin un manejo acertado del poder las fuerzas internas entran en colisión y expulsan al más débil.
El poder es un equilibrador, es el cemento que une a las personas tras un objetivo común.
Muchas de las empresas actuales y bastantes de sus directivos hunden sus racices intelectuales en el fascismo y el bolcheviquismo del principios del siglo XX (Noam Chomsky) Ocurre que estamos en el siglo XXI y que nuevos trabajadores, muy distanciados de esas corrientes de pensamiento dictatorial, se están integrando en las empresas.
¿Sabrán los directivos alcanzar un nuevo equilibrio colaborativo o continuarán diciendo que la empresa es una Arcadia feliz? ¿Sabrán los jóvenes, que lograr el poder en la empresa es un proceso de aprendizaje o querrán asaltar el Palacio de Invierno?
Tenemos un siglo para descubrirlo.
[…] . La moda actual en la empresa son los equipos en los que se integra un egoísta. Se encuentran en todas las empresas y alguno de sus integrantes solo se preocupan por ellos […]